El pasado 25 de septiembre se publicó en el Diario Oficial de la Unión Europea el Reglamento UE 2023/2055 de la Comisión, que contiene una serie de prohibiciones relativas a la fabricación y comercialización de productos considerados como microplásticos. Esto afecta especialmente a los campos deportivos de césped artificial con sustrato de caucho y a los parques infantiles también con superficie de caucho.
Desde el Proyecto LIFE T4C, financiado por la Unión Europea para ofrecer una alternativa sostenible a estas superficies y en el que se integran diversas empresas e investigadores universitarios, han querido hacernos algunas aclaraciones:
Los microplásticos ahora prohibidos por el nuevo Reglamento de la UE, son partículas de polímeros sintéticos inferiores a cinco milímetros que son orgánicas, insolubles y resistentes a la degradación. Este tipo de partículas se encuentran presentes en el sustrato de caucho añadido a los campos deportivos de césped artificial, que acaba por liberarse al medio ambiente de forma descontrolada.
El Comité de Evaluación del Riesgo de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas consideró en un informe previo que “el material de relleno para su uso en superficies deportivas de césped sintético es el mayor contribuyente en términos de uso de microplásticos en los productos, así como la mayor fuente de emisiones medioambientales”.
Por ello, la Comisión Europea estableció un periodo transitorio de ocho años “a fin de garantizar que un mayor número de superficies de deporte sintéticas existentes que utilicen este producto puedan alcanzar el final natural de su vida útil”.
Esto significa que, dentro de ocho años, todos los campos deportivos de césped artificial deberán prescindir de las micropartículas de caucho y reemplazarlas por otro sustrato diferente de los microplásticos y que no resulte perjudicial ni para la salud ni para el medio ambiente.
Ecolastene, la alterativa ecológica:
El pasado mes de septiembre se puso en marcha el Proyecto LIFE T4C, financiado con fondos europeas e integrado por un consorcio de empresas, que propone una alternativa a los actuales campos deportivos con relleno de partículas de caucho.
La base de esta alternativa es el Ecolastene, un producto desarrollado por la compañía Green World Compounding (GWC), con sede en Alhama (Murcia), que presenta múltiples ventajas:
- Reciclado y reciclable, con una baja huella de carbono.
- Seguro y libre de sustancias tóxicas.
- Diseño innovador, que impide que el material salga del terreno de juego.
- Ligero y ultraelástico, ofrece altas prestaciones con una baja cantidad.
- Fácil de instalar y compatible con cualquier tipo de césped.
- Certificado por organizaciones deportivas internacionales como FIFA.